2
se necesitaría de otro modo. Un cierto porcentaje de fraude es aceptable como inevitable.
Estos costos e incertidumbres de pagos pueden ser evitadas en persona utilizando dinero
físico, pero no existe un mecanismo para hacer pagos por un canal de comunicación sin
un tercero confiable.
Lo que se necesita es un sistema de pagos electrónicos basado en pruebas criptográficas
en vez de confianza, permitiéndole a dos partes interesadas en realizar transacciones
directamente sin la necesidad de un tercero confiable. Las transacciones que son
computacionalmente poco factibles de revertir protegerían a los vendedores de fraude, y
mecanismos de depósitos de fideicomisos de rutina podrían ser fácilmente implementados
para proteger a los compradores. En este trabajo, proponemos una solución al problema
del doble-gasto utilizando un servidor de marcas de tiempo usuario-a-usuario distribuido
para generar una prueba computacional del orden cronológico de las transacciones. El
sistema es seguro mientras que nodos honestos controlen colectivamente más poder de
procesamiento (CPU) que cualquier grupo de nodos atacantes en cooperación.
2. Transacciones
Definimos una moneda electrónica como una cadena de firmas digitales. Cada dueño
transfiere la moneda al próximo al firmar digitalmente un hash de la transacción previa y
la clave pública del próximo dueño y agregando estos al final de la moneda. Un
beneficiario puede verificar las firmas para verificar la cadena de propiedad.
El problema claro es que el beneficiario no puede verificar si uno de los dueños no se
hizo un doble-gasto de la moneda. Una solución común es introducir una autoridad central
confiable, o casa de moneda, que revisa cada si cada transacción tiene doble-gasto.