Las carreras de coches son más que un espectáculo deportivo, tras ellas hay una durísima competición entre equipos de ingenieros de las diferentes marcas tratando de comseguir el mejor automóvil para la competición. No solo consiguen así una imagen publicitaria para las casas patrocinadoras. También consiguen nuevos conocimientos que se aplicarán posteriormente en el transporte ordinario..

El trabajo de estos equipos no es sencillo: tienen que diseñar motores potentes, de consumo bajo; deben ser de peso ligero para aprovechar mejor esa potencia; también deben ser muy aerodinámicos para vencer la resistencia del aire...Intentaremos, de una forma modesta, emular su trabajo tratando de resolver el problema de aveiguar qué velocidad máxima se puede esperar de un coche de características determinadas. Si, por otra parte, te interesa la historia del automóvil, esta dirección puede serte útil.

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