La Zona Bananera del Caribe colombiano se hallaba situada en la primera mitad de siglo XX en lo que hoy es el actual departamento del Magdalena, y se extendía entre la Sierra Nevada de Santa Marta y la Ciénaga Grande de Santa Marta por una llanura de 40.000 hectáreas. Se encuentra a nivel del mar y su temperatura supera los 30 grados centígrados en promedio. Durante la primera mitad del siglo XX su producción competía con la de países enteros de la cuenca del Caribe, ocupando una importante cuota del mercado mundial, iniciándose su decadencia en la década de los 60 del siglo pasado. Las exportaciones de bananas comenzaron por iniciativa de la United Fruit Company (UFC), la cual invirtió en preparar infraestructuras para convertir ciertos núcleos urbanos en un enclave exportador. Las favorables condiciones de producción y exportación sólo se vieron interrumpidas por dos coyunturas: la de la Gran Depresión y la de La Segunda Guerra Mundial. Los hechos en cuestión parten desde el día 12 de Noviembre de 1928 cuando estalla una gran huelga en toda la región bananera del Magdalena. Una huelga que contó con la participación de más de 25 000 trabajadores de las plantaciones bananeras, los cuales se negaban a cortar la fruta hasta tanto sus condiciones laborales y prestacionales no fueran mejoradas. Esta huelga obrera básicamente tuvo como finalidad presionar a la multinacional estadounidense United Fruit Company para que legalizara las condiciones contractuales de los obreros que por jornal laboraban en sus plantaciones 6 . Se estimaba que había 150 000 obreros dedicados al negocio bananero a cargo de la UFC en toda la Gran Cuenca del Caribe, de lo que se infiere que el 16,7% del total de los trabajadores de la compañía multinacional correspondía a empleados colombianos y por ende, los huelguistas. La producción de la UFC en la región bananera del Magdalena para el año del conflicto ascendía a 10,3 millones de racimos exportados, lo que dio como resultado que Colombia se ubicara como el tercer productor de banano en el mundo. Además, hizo que este producto estadísticamente fuera el 7% del total de las exportaciones del país 7 y una de las mayores fuentes de empleo en el Caribe colombiano 8 . Para las primeras tres décadas del siglo XX, la industria bananera se expandió rápidamente, en donde la United Fruit Company no sólo desarrolló sus operaciones en Colombia, 6 Para comprender mejor este contexto, recomiendo ver los trabajos de Robles Zabala, Joaquín, “La Reinvención de la Historia: una visión macondiana de la masacre de las bananeras”, pp. 1-6; y de Archila Neira, Mauricio, “Sangre en la plantación”, Ver artículo completo en: http://platohedro.blogspot.com/2008/12/sangre-en-la-plantacin.html. [Consultado el 04 de agosto de 2009]. Payares González, Carlos, “Las Moscas del Banano. Memoria de una Epopeya”, en Memoria de una Epopeya, 80 años de la Huelga y Masacre de las bananeras del Magdalena, Alcaldía Municipal de Ciénaga, Santa Marta, 2008. 7 Toda la información concerniente a la United Fruit Company y su relación con los trabajadores y los movimientos obreros, los sintetizó en su trabajo Buchelli, Marcelo, “Tras la visita del señor Herbert: United Fruit Company, élites locales y movimiento obrero en Colombia”, en Empresas y empresarios en la historia de Colombia Siglos XIX-XX. Una colección de estudios recientes, CEPAL, Ediciones Uniandes-Norma, Bogotá, 2002, pp. 737-770. 8 Rodríguez Acosta, Antonio Luís, El banano y su desarrollo en Colombia, Fondo Editorial Universidad del Magdalena, Santa Marta, 2001. Para una mayor comprensión de la capacidad productiva y de exportación de la fruta, fuera de este autor, también ver estadísticas en Nichols, Theodore, Tres Puertos de Colombia. Estudio sobre el desarrollo de Cartagena, Santa Marta y Barranquilla, Banco Popular, Bogotá, 1973; Díaz Granados, Manuel, Geografía Económica del Magdalena Grande (1946-1955), Instituto de Cultura del Magdalena, Santa Marta, 1996, pp. 284-289; Meisel Roca, Adolfo, “La economía de Ciénaga después del Banano”, en Documentos de trabajo sobre economía regional, Banco de la República, Cartagena, 2004; Viloria de la Hoz, Joaquín, “Historia Empresarial del Guineo: Empresas y Empresarios Bananeros en el Departamento del Magdalena, 1870-1930”, en Cuadernos de Historia Económica y Empresarial, Nº 23, Centro de Estudios Económicos Regionales Banco de la República, Cartagena, 2009.
sino que lo hizo de manera simultanea en Jamaica, Cuba, República Dominicana, Costa Rica, Panamá, Honduras y Guatemala 9 . Según Catherine Legrand, la UFC en la década de 1920 tenía 1.383.485 hectáreas de terreno cultivadas de banano, había construido 2.434 kilómetros de líneas ferroviarias y poseía noventa barcos de vapor conocidos como la Gran Flota Blanca, que transportaban el banano de estos países referenciados hacia Europa y Norteamérica 10 . El poderío de la United Fruit Company era tan grande que ya para 1928 había construido 5.636 kilómetros de cables telegráficos y telefónicos y 24 estaciones de radio. Lo que se pretende con este escrito es detallar cómo ocurrieron los hechos 11 y analizar el porqué de las cosas, especificando además quiénes intervinieron y qué repercusiones tuvo el suceso para la región y el país. En este conflicto, los trabajadores de las plantaciones bananeras no fueron los únicos afectados y vinculados a la huelga, sino también obreros que estaban empleados en el puerto al servicio de la Gran Flota Blanca y del ferrocarril propiedad de la Santa Marta Railway Company; igualmente pequeños agricultores, comerciantes y tenderos 12 . Días previos a la Masacre El problema en cuestión radicaba en que la compañía multinacional no quería contratar de manera directa a los trabajadores de las plantaciones. Lo que siempre hacía para evitar el pago de contraprestaciones laborales era subcontratar a través de terceros, ya que al momento de ser contratado un trabajador, en una de las cláusulas del convenio laboral se estipulaba “todos los detalles del trabajo serán a cargo del contratista, y ni el contratista ni sus empleados serán trabajadores de la United Fruit Company”. De todas estas artimañas contractuales se valía la multinacional, incluso para evadir sus responsabilidades ante la legislación colombiana, porque alegaban que los obreros de las plantaciones no eran trabajadores suyos sino de un contratista, y era el contratista quien tenía la obligación y no ellos como empresa. El objetivo primordial de la huelga era que la UFC reconociera como suyos a los obreros, pues desde 1915 el Gobierno colombiano 13 ya había emitido leyes que regulaban las condiciones de los trabajadores 14 y que 9 Para las estadísticas de exportaciones de banano a nivel mundial, ver a Solori, John, “Banana Cultures: Linking the Production And Consumption of Export Bananas, 1800-1980”, en Banana Wars. Power, Production, and History in the Americas, Duke University Press, Durham and London, 2002. 10 Para comprender mejor la situación mundial del negocio bananero, ver a Striffler, Steve, Moberg, Mark, Banana Wars. Power, Production, and History in the Americas, Duke University Press, Durham and London, 2002. Para el caso de Centroamérica se recomienda ver los trabajos de Euraque, Darío, “El Imperialismo y Honduras como “Repúblicas Bananera”: Hacia una nueva Historiografía”, ponencia presentada en la Conferencia de Latino American Studies Association (Lasa), Guadalajara, 1997; así mismo en su libro Euraque, Darío, Reinterpreting the Banana Republic. Region and State in Honduras, 1870-1972, Chapel Hill and London, 1996; en el capítulo Euraque, Darío, “The Threat of Blackness to the Mestizo Nation: Race and Ethnicity in the Honduran Banana Economy, 1920s and 1930s”, en Banana Wars. Power, Production, and History in the Americas, Duke University Press, Durham and London, 2002. Para el caso de Cuba, aunque no fue de plantaciones bananeras sino de Caña de Azúcar, la dinámica fue la misma. Ver los trabajos de Zanetti Lecuona, Oscar, “La United Fruit Company en Cuba: Organización del Trabajo y Resistencia Obrera”, en Revista Clío América, Nº 4, Universidad del Magdalena, Santa Marta, 2008, pp. 238-258; de igual forma a Zanetti Lecuona, Oscar y García Álvarez, Alejandro, United Fruit Company: un caso del dominio imperialista en Cuba, Editorial Ciencias Sociales, La Habana, 1976. 11 Rodríguez Acosta, ob.cit. 12 Para el desarrollo de este escrito fue de imperiosa necesidad acudir a los archivos de la época, los cuales están ubicados en la ciudad de Bogotá, en la Biblioteca Nacional de Colombia, Hemeroteca “Manuel del Socorro Rodríguez”, y en el Archivo Histórico del Magdalena Grande ubicado en la ciudad de Santa Marta. 13 Para comprender mejor el mundo interno de las plantaciones bananeras de la United Fruit Company a nivel global,