El valor máximo de la derivada direccional ocurre cuando ∇f y el vector unitario apuntan en la misma dirección. Por lo tanto, comenzamos calculando ∇(x,y):
fx(x,y)∇f(x,y)=6x−4y y fy(x,y)=−4x+4y,luego=fx(x,y)i+fy(x,y)j=(6x−4y)i+(−4x+4y)j
A continuación, evaluamos el gradiente en (−2,3):
∇f(−2,3)=(6(−2)−4(3))i+(−4(−2)+4(3))j=−24i+20j
Necesitamos encontrar un vector unitario que apunte en la misma dirección que ∇f(−2,3), por lo que el siguiente paso es dividir ∇f(−2,3) por su magnitud, que es (−24)2+202=976=461. Por lo tanto
Este es el vector unitario que apunta en la misma dirección que ∇f(−2,3). Para encontrar el ángulo correspondiente a este vector unitario, resolvemos las ecuaciones
cosθ=61−661 y senθ=61561
para \thtea. Como el coseno es negativo y el seno es positivo, el ángulo debe estar en el segundo cuadrante. Por lo tanto, θ=π−arcsen((561/61))≈2.45rad.
El valor máximo de la derivada direccional en (−2,3) es ∣∣∇f(−2,3)∣∣=461 (ver la siguiente figura).
Figura 4.42. El valor máximo de la derivada direccional en (−2,3) está en la dirección del gradiente.