Ejemplo 1

Hallar la intersección entre las rectas:

r1:(x,y,z)=(2,1,3)+α(1,4,5)

r2:(x,y,z)=(1,0,2)+β(0,3,1)

v1v2r1r2

Para buscar la intersección, escribimos las ecuaciones paramétricas de las rectas y luego igualamos:

r1:{x=2+αy=1+4αz=3+5α,r2:{x=1y=3βz=2β

{2+α=11+4α=3β3+5α=2β

Nos queda un sistema de tres ecuaciones y dos incógnitas.

De la primera ecuación se obtiene: α=3

Reemplazando α=3 en la segunda ecuación, resulta: β=133

Pero si sustituimos ambos valores en la tercera ecuación:

3+5.3=2133

18=193

Como esto es falso, el sistema es incompatible. Habíamos descartado paralelismo, por lo tanto podemos afirmar que las rectas son alabeadas.

Observación: Los sistemas que tienen más ecuaciones que incógnitas se denominan sobredeterminados y en general son incompatibles.

Ejemplo 2

Hallar la intersección entre las rectas:

r1:(x,y,z)=λ(1,0,1)

r2:(x,y,z)=β(1,1,0)+(0,1,1)

Observemos que los vectores directores de las rectas no son paralelos, luego las rectas no pueden ser paralelas. Podrían intersecarse o ser alabeadas.

Escribimos las ecuaciones paramétricas de las rectas e igualamos:

r1:{x=λy=0z=λ,r2:{x=βy=β+1z=1

{λ=β0=β+1λ=1λ=1β=1

Como el sistema tiene solución, podemos afirmar que las rectas se intersecan, o sea son concurrentes. Para averiguar en qué punto se cortan, podemos reemplazar λ=1 en las ecuaciones paramétricas de r1 o β=1 en las ecuaciones paramétricas de r2. Así obtenemos el punto de intersección P(1,0,1).

Observación: En este ejemplo, las rectas se cortan en el punto P(1,0,1). En r1, el punto P se corresponde con λ=1. En cambio en r2, P se corresponde con β=1. Por lo tanto, cuando buscamos la intersección entre dos rectas debemos utilizar letras diferentes para indicar los respectivos parámetros. Noten que si hubiéramos utilizado el parámetro λ para las dos rectas, habríamos obtenido un absurdo: λ=1yλ=1 y esto nos habría inducido a error.