Reconocimiento del trabajo ajeno. La cita permite dar crédito a los autores originales por sus ideas, investigaciones o palabras, evitando el plagio y promoviendo la ética académica.
Fortalece la credibilidad del texto. Las citas muestran que el contenido está respaldado por fuentes confiables, lo que aumenta la autoridad y la confiabilidad del trabajo.
Permite la verificación de la información. Al incluir citas, los lectores pueden rastrear las fuentes para verificar la información o profundizar en el tema si lo desean.
Fomenta la transparencia intelectual. Citar evidencia que respalde las ideas demuestra un compromiso con la precisión y la honestidad en la presentación de la información.
Facilita la conexión entre ideas. Las citas muestran cómo el texto se relaciona con investigaciones previas, ayudando a construir un contexto más amplio o un diálogo entre autores.
Impulsa el aprendizaje y la investigación. Al citar, se estimula el hábito de consultar y explorar distintas fuentes, lo que contribuye a un conocimiento más sólido y bien fundamentado.