A lo largo del siglo XIX con objeto de presentar de modo racional los conocimientos de la Química, se creyó que podría ser muy útil
los elementos de algún
modo que reflejase las relaciones existentes entre ellos.
Tras varios intentos, en 1869, el químico ruso D.
presentó una tabla en la que aparecían los
distribuidos en
y columnas, agrupados ordenadamente en diversas familias, siguiendo un orden creciente de
.
En la actualidad se ordenan los elementos por orden creciente de
atómico. Dicha tabla es una expresión de las relaciones que existen entre los
químicos. Por eso, favorece su estudio y nos permite deducir muchas de sus
con sólo saber su situación en ella.
Las 7 filas horizontales reciben el nombre de
y las 18 filas verticales o columnas se llaman
. Algunos de estos
tienen nombres especiales; así ocurre con el 16, los
(O,S,Se,Te); el 17, los
(F,Cl,Br,I), o el 18, los gases
(He,Ne, Ar,...).